Cuando se alquila una vivienda, surge la pregunta sobre quién debe pagar el seguro de impago de alquiler. El seguro de impago de alquiler beneficia principalmente a los propietarios al protegerlos contra posibles impagos por parte de los inquilinos. Aunque ambos, propietarios e inquilinos, pueden beneficiarse de este seguro, ya que puede facilitar la búsqueda de vivienda para los inquilinos y reducir la cantidad de depósito requerido, además de evitar problemas legales en caso de dificultades financieras. Para contratar este seguro, la aseguradora verifica la solvencia del inquilino, asegurándose de que no esté en listas de morosos y que sus ingresos sean suficientes para cubrir la renta. La póliza del seguro de impago de alquiler generalmente debe estar a nombre del propietario, aunque el acuerdo de quién debe pagarla puede variar entre las partes. Sin embargo, no se recomienda que los pagos se domicilien en la cuenta del inquilino, ya que si no paga el alquiler, es probable que tampoco pague el seguro.El costo de este seguro suele oscilar entre el 3% y el 5% del precio del alquiler anual, pero puede variar según la compañía aseguradora y el tipo de producto. La contratación del seguro debe ser realizada por el propietario, ya que es quien obtiene la garantía de cobro en caso de incumplimiento por parte del inquilino. Aunque la contratación del seguro no es obligatoria, la Ley de Arrendamientos Urbanos permite la contratación de garantías adicionales para asegurar el pago de la renta. Este seguro ofrece protección al propietario tanto en términos de defensa legal como de cobertura de daños económicos e infligidos por el inquilino.

Fuente: Idealista